El presidente electo de Panamá, José Raúl Mulino, habló en La W sobre su propuesta de cerrar el Darién para suavizar la crisis migratoria; la posibilidad de habilitar la segunda vuelta electoral; el lío judicial que hay con el expresidente Ricardo Martinelli, quien fue inhabilitado tras ser condenado a 10 años y 6 meses por blanqueo de capitales; el Tratado de Libre Comercio con China y cómo gobernará con una Asamblea mayoritariamente opositora.
Cerrar la selva del Darién
Sobre la polémica propuesta de cerrar el Darién, Mulino indicó que “la vamos a hacer implementando un programa de seguridad, un programa con mucha tecnología, buscando un acercamiento importante con Colombia, con el presidente (Gustavo) Petro, a quien no conozco y jamás he hablado con él en mi vida, pero me interesa tener con él y con el Gobierno de Colombia una relación como la que siempre ha tenido Panamá: franca, abierta y sincera”.
Si bien es una selva complicada que sirve como frontera natural entre ambos países, “podemos contar con tecnología para hacerlo y dinamizar todo el patrullaje de nuestra Policía de frontera a lo largo y ancho del Darién, desde “el Atlántico hasta el Pacífico”, explicó el presidente electo, añadiendo que esa solución “es mucho mejor que tener el problema humanitario que tenemos ahí todos los días”. Según las cifras dadas por Mulino, el año pasado cruzaron por el Darién más de 600.000 migrantes irregulares.
“Colombia tiene la puerta de salida y nosotros la de entrada no para Panamá, sino para Estados Unidos, que será un actor importante en las decisiones que tenemos que tomar para ir solventando esta situación, la cual cada vez se agrava más”, aseguró el presidente electo del partido Realizando Metas (RM).
Según Mulino, es posible “tener con la policía de fronteras un plan a corto plazo para ir resolviendo” uno de los mayores problemas del Siglo XXI. “Por supuesto, intentaremos manejar un plan de repatriación rápida con apego a los derechos humanos, porque esos señores que entran en Panamá no son delincuentes hasta donde se sabe, la inmensa mayoría vienen huyendo, buscando un mejor destino, pero no puede ser a costa de nuestro país, de nuestra seguridad y de la estabilidad”.
Sobre el papel de Estados Unidos, el delfín de Martinelli expresó sus dudas sobre si puede convencer a la Casa Blanca para que resuelva completamente el problema fronterizo. Lo que sí puedo hacer es que nos ayuden a resolver el problema nuestro y de Colombia. Nos tienen que ayudar porque ese flujo migratorio, que no es nada más de venezolanos, colombianos, sino gente de Haití, África, India, y chinos que tienen como destino los Estados Unidos.
Según el actual ministro de Seguridad Pública de Panamá, Juan Manuel Pino, Colombia ha dejado mucho que desear a la hora de ayudar a manejar la crisis migratoria. Sobre esto, el presidente electo panameño dijo que no tiene conocimiento sobre esas declaraciones.
“Si el Gobierno e Panamá lo ha dicho, fue el presidente (Laurentino) Cortizo. Siempre que me he referido al asunto (del Darién) lo he mencionado como un gesto de muy buena voluntad, de mucha amistad colombo-panameña. Yo quiero a Colombia, soy una persona que entiende y tengo muy buenos amigos en Colombia de la clase política desde los años 90. Yo no soy quién para hacer ese juzgamiento. Intentaré buscar esa relación, esa cooperación con un Gobierno que es nuestro vecino, no podemos ignorar que ese país siempre será nuestro vecino. Yo quiero utilizar esa relación para bien, como lo hemos hecho en otras ocasiones”, resaltó.
Inhabilitación del expresidente Ricardo Martinelli
Sobre el caso del expresidente Ricardo Martinelli, quien fue inhabilitado por casi 11 años, comentó que “yo soy abogado de 42 años. Conozco la ley panameña. Ese es un tema jurídico que tiene que enfrentarse con los abogados del señor Martinelli. No puedo yo más que desear que se solucione. Yo vi ese juicio. Lo dieron televisado. Vi también el otro juicio. Ricardo Martinelli es la única persona que ha sido juzgado dos veces en juicio público por la misma causa y salió absuelto. Y ahora en esta caza fue un juicio preñado de ilegalidades y de violaciones al debido proceso”.
Añadiendo que “no pudieron probar un solo dólar producto de dinero sucio. Pero la consigna de todos estos 10 años ha sido todos contra Martinelli y todo lo que huela Martinelli. A mí me metieron 6 meses preso. (El expresidente Juan Carlos) Varela, con su procuradora en la guantera del carro, que cargaba con una procuradora que salió en los ‘Varela Leaks’, que tuvo que salir del puesto huyendo y más nunca le dio la cara al país, igual que él como presidente. Ciertamente, eso tendrá que verse en la esfera jurídica y no en la política.”
Asimismo, destacó que “la rama judicial ya falló y yo tengo toda la libertad como abogado que escuchó ese juicio de opinar como corresponde. Yo fui víctima de esa moledora judicial de Valera, a mí no me echan cuento. A los únicos que han condenado son los relacionados a Martinelli, a más nadie. Yo opino como opino porque lo viví y lo sufrí.”
“Yo dije que a partir de ayer se paraba la persecución política en este país, yo aspiro que esa Corte Suprema y el Ministerio Público de Panamá lo hayan entendido, este no será un Gobierno de persecución con nadie. El que tenga un problema judicial, que lo dirima en esa rama, yo soy respetuoso de la separación de poderes, pero no me van a callar respecto a lo que yo pienso que ha sido la Justicia en todos estos últimos 10 años. Ha sido una justicia manipulada y controlada desde el Poder Ejecutivo, no me van a echar cuentos a mí que la sufrí”, especificó.
¿Será el presidente de Panamá o escuchará las órdenes de Martinelli?
“Quien me conoce a mí sabe perfectamente cómo soy yo. Tengo criterio. El presidente de la República de Panamá soy yo. Tomaré las decisiones porque a mí es a quien corresponde gobernar y tener al equipo de gobierno que responda a los intereses del plan de gobierno para solucionar los problemas del país. Yo no tengo ningún compromiso. Ricardo Martinelli nunca me pidió a mí ningún compromiso. Siempre tuvimos ambos la idea de gobernar con los mejores, tener un gobierno de lujo, un gobierno que rinda los frutos necesarios para solventar la inmensa cantidad de problemas que tiene este país”, respondió ante los cuestionamientos de su independencia como jefe de Estado.
Mina de cobre
Panamá vivió una crisis por la mayor mina de cobre a cielo abierto de Centroamérica, crisis que llevó a la Corte Suprema de Justicia de Panamá a declarar “inconstitucional” el contrato que renovó la concesión de explotación de dicha mina.
Para el presidente electo, “la crisis de la mina fue en gran medida causada por dos razones: el hastío nacional por la ausencia de Gobierno que hemos tenido en cinco años y el pésimo manejo que dio la empresa First Quantum con el Gobierno al problema. La mina está ahí, parada pero ahí está”.
Sin embargo, “no se puede quedar así. Hay que explorar el concepto que he escuchado de ‘abrir para cerrarla’. Lo que cuesta cerrar esa mina no lo puede pagar Panamá y no lo va a pagar nadie. Con lo mismo que se va generando de la mina, se va utilizando para irla cerrando paulatinamente. Son ideas en borrador. No he hablado de esto con nadie en campaña, más allá de dos o tres cafés con amigos”, insistió Mulino.
Por último, enfatizó que “ese contrato no puede volver a revivirse porque es inconstitucional. Soy consciente de que el problema está así. Pero que, sin afectar nuestro medio ambiente ni la tranquilidad de nuestro país, hay que enfrentarlo. Uno no puede ser tan irresponsable de dejar las cosas tiradas por ahí cuando el daño ecológico puede ser inmenso si no se atiende con urgencia”.
FUENTE: WRADIO – JUAN ESTEBAN SILVA